Llagostera es un encantador municipio situado en la comarca del Gironès, en la provincia de Girona. Está perfectamente comunicado y cuenta con excelentes conexiones por carretera, siendo el municipio más grande de la comarca.
Comenzamos nuestro día de turismo en Llagostera visitando la iglesia de Sant Feliu, que se encuentra en lo alto del casco antiguo del pueblo. Esta iglesia parroquial de planta rectangular y estilo gótico tardío cuenta con un imponente portal de estilo barroco catalán. Admiramos su belleza arquitectónica y nos maravillamos con las vistas panorámicas desde la Plaça de la Vila.
Continuamos nuestro recorrido y nos dirigimos hacia la Capella de Sant Llorenç de Llagostera, una encantadora capilla situada en la cima del Turó de la Capella. Con su planta rectangular y paredes de piedra, esta capilla de construcción popular nos transporta a tiempos pasados. Disfrutamos de la tranquilidad del entorno y apreciamos su arquitectura única.
Seguimos nuestra visita y llegamos a la Capella del Roser de Llagostera, una capilla de planta rectangular ubicada en el Carrer de Barcelona. Esta capilla, construida en estilo gótico-renacentista, es otro ejemplo fascinante de la arquitectura local. Nos detenemos un momento para admirar su fachada y apreciar los detalles arquitectónicos.
Luego nos dirigimos hacia Sant Ampèlit, una pequeña capilla en el vecindario de Panedes, dentro del término municipal de Llagostera. Esta capilla de arquitectura románica y popular nos cautiva con su encanto sencillo. Observamos su tejado de tejas a dos aguas y nos sumergimos en la historia de este lugar de culto.
Continuamos nuestra visita en Llagostera explorando dos impresionantes castillos históricos.
El primero en nuestra lista es el Castell de Llagostera, ubicado en el núcleo antiguo de la población, en la comarca del Gironès. Aunque solo se conservan restos del castillo y parte de las murallas, su presencia evoca la grandeza de su pasado. Este castillo, construido en el siglo XIV, nos transporta a épocas medievales y nos invita a imaginar la vida en tiempos pasados. Admiramos su arquitectura y apreciamos la importancia histórica de este sitio.
Continuamos nuestro recorrido hacia el Castell de Montagut, una antigua fortaleza situada en la cima del pico de Montagut, en el vecindario de Sant Llorenç. Este castillo, considerado una obra de los siglos X-XI, nos sumerge en la época medieval y nos permite apreciar la arquitectura defensiva de la época. Exploramos sus alrededores y disfrutamos de las vistas panorámicas que ofrece desde lo alto.
Antes de finalizar nuestra jornada, visitamos la Torre dels Moros, un yacimiento arqueológico en el vecindario de Panedes. Aquí encontramos los restos de unas termas de época tardorromana que se utilizaron hasta la alta Edad Media. Nos maravillamos con la estructura romana y el legado histórico que se conserva en este lugar.