Cassà de la Selva, un encantador municipio situado al pie de les Gavarres, en la comarca del Gironès, fue el destino de mi día de turismo. Este lugar ofrece una combinación perfecta entre historia, arquitectura y entorno natural.
Comencé mi visita en Les Voltes de les Mesures, una obra emblemática del municipio. Se trata de un porche público de planta rectangular, construido en el siglo XV. Quedé maravillado por su estilo arquitectónico de arquitectura popular y su ubicación en la Travessa de les Mesures.
Luego, me dirigí a Sant Martí de Cassà, una impresionante iglesia del siglo XVI. Su estilo arquitectónico gótico y renacentista atrajo mi atención. Me sumergí en la historia y la belleza de este lugar, ubicado en la Plaça de Sant Pere.
Continué mi recorrido hacia la Sala d'en Galà, una obra arquitectónica con elementos decorativos de diferentes estilos. Esta construcción del siglo XX presenta un estilo ecléctico y se encuentra en el Carrer de la Mel. Quedé fascinado por la mezcla de estilos y la originalidad de esta sala.
No podía dejar de visitar el Mas Rovirola y la capella del Remei, una masía con una capilla destacada. Esta obra del siglo XVII y XVIII conserva su campanario de espadaña y presenta un estilo arquitectónico de obra popular. Me impresionó la belleza y la historia que rodea a este lugar.
Para disfrutar de la naturaleza, me acerqué a la riera Verneda, un curso fluvial que nace en les Gavarres, cerca del Puig Gros, y atraviesa Cassà de la Selva. Este río da nombre a un barrio de Cassà de la Selva conocido como Veïnat de Verneda. Disfruté de un agradable paseo por sus alrededores, admirando la belleza del entorno natural.
Continué mi visita en Cassà de la Selva explorando más de sus obras destacadas y su entorno natural.
Me acerqué a la Estació de ferrocarril, una construcción del siglo XIX que fue la antigua estación de tren. Este edificio aislado de planta rectangular presenta un estilo arquitectónico ecléctico. Me maravillé con su encanto histórico y su ubicación en el Passeig del Ferrocarril.
Luego, descubrí la casa Frigola, una obra arquitectónica que destaca en el municipio. Esta casa de planta cuadrangular, construida con piedra, muestra influencias del gótico tardío y elementos de arquitectura popular. Su ubicación en el Carrer d'Avall le da un aire pintoresco al lugar.
Para disfrutar de la naturaleza, me dirigí hacia las montañas de la zona. El Puig Ventalló, con una altitud de 215 metros, se encuentra entre los municipios de Cassà de la Selva y Llambilles. Su imponente presencia ofrece la oportunidad de disfrutar de hermosas vistas panorámicas.
Otra montaña notable es el Puig Segalar, con una altura de 191 metros, ubicado en el propio municipio de Cassà de la Selva. Su entorno natural y su belleza paisajística lo convierten en un lugar ideal para realizar caminatas y explorar la flora y fauna local.
Cassà de la Selva demostró ser un destino completo, combinando su patrimonio arquitectónico con la belleza natural de sus montañas. Me maravillé con la diversidad de atracciones que ofrece y con la hospitalidad de sus habitantes. Sin duda, este lugar dejó una huella en mi memoria y me animó a regresar en el futuro para seguir explorando sus encantos.